1. ¿Cómo se presentó el arte en tu vida?
Desde pequeña el arte se manifestó en mi vida. Recuerdo que, en primer grado, tenía 5 años, y mi cartuchera tenía muchos lápices de colores. Pintaba con todos ellos. El cabildo, era multicolor, me viene la imagen de ladrillos de todos los colores; al igual que las casas y demás dibujos.
Todo lo manual me fascinaba, trabajar con los distintos materiales artísticos era maravilloso.
Fue la forma de expresión, ya que era muy tímida y lo que no decía con palabras delante de la gente, lo hacía a través del arte, de la plástica.
Descubrí que me encantaba dibujar rostros, lograr el hiperrealismo. Armé una carpeta con muchos trabajos donde el rostro era el protagonista.
Esta fue mi primera etapa en el arte autodidacta. Años mas tarde, ingrese en la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón.
2. ¿Cuándo decidiste dedicarte a esto?
No fue un día establecido. El arte siempre estuvo vivo en mis días. Lo normal para mi era dibujar hojas y hojas con fibras, lápices, pinturas. Siempre me fascinaron los ojos de los dibujos japoneses, la luminosidad, su estructura. Y comencé a dibujar ojos y caras.
Recuerdo tener muchos blocs con dibujos.
Ya en la escuela secundaria, se reflejaba más este don, debido a las propuestas en arte que me daba la profesora de plástica. Yo estaba cursando el comercial, y esto no tenia nada que ver conmigo. Nada de números, solo colores, formas, y creatividad. Mi rumbo era otro, que no era económicamente bien visto, no me iba a dar trabajo. Y tenia que estudiar algo mas rentable. Pero, todo fue por otro camino.
Dejé a mitad de camino el secundario, y comencé a trabajar en un taller de cerámica y porcelana. Mi prueba fue hacer las caritas de las figuras. Era lo mío hacer ojos pequeños, y muy expresivos. Fue todo un desafío y no me costó; por toda la práctica que ya tenía con anterioridad.
A los 18 años supe que quería avanzar en la carrera artística, y decidí dar libre el secundario y luego, entrar en la Escuela de Bellas Artes.
Paralelamente, estaba colaborando en mi Parroquia Luján Porteño, realizando carteleras a las que le daba mi impronta artística y mensaje de espiritualidad, que caracteriza mi obra.
En la Escuela Pridiliano Pueyrredón, cursé y me recibí en la especialidad “Grabado y pintura”.
Comencé a trabajar en el área artística en colegios primarios: Instituto San Ramón Nonato (Villa Luro), Instituto Luján Porteño (Parque Avellaneda), Instituto Nuestra Señora del Buen y Perpetuo Socoro (Versalles).
En 2014, conocí el mosaico, me fascinó y me atrapó. Desde entonces, me dediqué a desarrollar mi obra con esta técnica. En varios lugares de Buenos Aires, en Parroquias, y hasta en algunas provincias tienen algunas de mis obras.
3. ¿Creés que el arte es sanador?
Creo que primero, hay que sentirse o saberse enfermo para poder experimentar la sanación a través del arte. Mi respuesta es sí.
El ser humanos atraviesa momentos de afecciones físicas y espirituales. Yo, los he vivido. Por eso puedo decir, que el arte me ayudó en momentos de enfermedad junto con la Fe. No puedo separar arte y Fe, tiene que ver con mi esencia.
En esos momentos bisagra, me dediqué de lleno a hacer trabajos en mosaico, como por ejemplo el mural de Santa Rosa de Lima en 2017, para la basílica homónima ubicada en Buenos Aires.
Sin interrupción, fui haciendo murales, cuadros, exposiciones, talleres, escritos, misiones solidarias; todo con la Fe y el arte del mosaico.
4. ¿Con qué propósito realizás tu arte?
Arte es en esencia comunicación. El arte siempre comunica, te hace pensar, podes contemplarlo simplemente. El arte desnuda el alma del artista. El arte congrega. Lo que no decimos con palabras lo decimos con la imagen.
5. ¿Qué deseas comunicar a través de tus obras?
Obviamente que valores, por ejemplo, el valor de la vida. Los sentimientos, la belleza, la fe. Hoy la humanidad está deshumanizada, muchos valores son negados, desdibujados también. Se viven los antivalores. Es muy triste pensar el hoy y el futuro del hombre con todo esto. Por eso, siempre reflejo la vida a través de las Miradas. Muy importante en mi obra.
La música, también aparece en mis obras, a través de los rostros de los hacedores de la misma.
Los niños, son también plasmados en mis mosaicos. Su inocencia, su ternura, su sonrisa.
La Fe, valor esencial en mi vida. Es por esto, que muchas de mis obras tienen que ver con el arte religioso. Amo los íconos.
6. ¿Qué es la pintura o tu técnica para ti en la vida, y qué es lo más loco que hiciste por ello?
El mosaico es como la vida misma. Los problemas, las situaciones difíciles, nos rompen. Podemos tener dos actitudes, caernos o levantarnos. Podemos quedarnos rotos o rearmarnos, y hacer una mejor versión de nosotros mismos. En el mosaico, hay muchos materiales rotos, muchos no encajan aparentemente, pero se vuelven a juntar de una nueva manera, creativa, logrando algo nuevo e inesperado, muchas veces. Surgió una nueva obra. Única e irrepetible.
Como me atrapo tanto este arte y quería desarrollarlo, hice muchas cosas locas. Iba por la calle mirando si encontraba material cerámico en los contenedores y otros lugares, ¡y los encontraba! Una vez, me ayudó un muchacho con su carro de cartones, ya que yo sola no podía con tanta cantidad de material. A cambio, me pidió un sándwich y una gaseosa.
También dormía muy poco para poder hacer las obras que me pedían, ya que trabajaba todo el día en los colegios y solo de noche y de madrugada podía adelantar trabajo. Y ni que hablar de los sábados y domingos, me la pasaba a full en el taller. Era lo más lindo para hacer en el finde.
7. ¿Crees que eres un ser elegido para contar con este don o talento?
Yo creo que todos tenemos una misión. Fuimos elegidos para algo en la vida. Nos dieron dones, talentos, cualidades, para poder desarrollarlos. Cada uno, según su misión. Podemos descubrirla temprano o más tarde. Al descubrirlos podemos, por miedo, dejarlos guardados, una actitud de desinterés; o podemos desarrollarlos y que den fruto; y así dejar una huella en el mundo.
8. ¿Qué otras áreas artísticas complementan tu arte y por qué las eliges?
Para mi la base es el dibujo. Saber plantear una imagen, plasmar una idea, estructurar la forma. Es imprescindible.
También la pintura, que aparece en muchos de mis cuadros, al igual que el mosaico, es abstracta. Nada que ver con el realismo de los mosaicos. Pero se complementan, figura- fondo. Muchas veces, la pintura donde los fondos, la mancha, la pintura es una obra en si misma.
9. ¿Eres un instrumento de tu arte y lo realizas en cualquier momento o sólo cuando dispones de tiempo?
Hoy día, puedo hacerlo en cualquier momento. Siempre me rondan ideas de futuras obras y series de obras. Es un trabajo mental que me va disponiendo para comenzar la nueva obra. Muchas veces, un acontecimiento muy movilizador internamente, genera una nueva obra. Puede ser a partir de una alegría o de una tristeza.
10. ¿Cómo definirías tu arte?
Vital, que emociona, realista, cargado de espiritualidad, comprometido, respetuoso, lleno de valores y expresión de belleza.
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